Preludio visual hacia el sonido

He de decir, que Placebo no es uno de mis grupos favoritos, sin embargo, la portada de su álbum Sleeping With Ghosts, es probablemente una de las portadas que más me gusten de la historia musical.

Considero importante el hecho de que no aparezca la típica foto de la cara del intérprete, ni a los componentes de la banda con una pose más calculada que una derivada. Ni siquiera una portada con 4 fotos de las caras de cada uno de los Beatles me parece original, más bien me parece mediocre, pero ahí estaba la del Abbey Road para crear un sinfín de hipótesis, teorías y majaderías.

Hay portadas como la del álbum Nevermind de Nirvana, que me parecen curiosas, atrayentes, y con un mensaje que hay que saber leer entre líneas. Hay otras, como la del primer trabajo de Muse, Showbiz, que me parecen originales y exquisitas. Otras más nacionales, como la portada del segundo trabajo de Havalina, Imperfección, evocan sencillez y calidez al mismo tiempo, porque transmiten tranquilidad.

Y qué decir, de portadas minimalistas como la del primer EP del grupo zaragozano Velouria, donde unas tijeras nos llevarán a un mundo, a una dimensión recortada y modelada al antojo de unos riffs y unos ritmos peculiares.

Es el arte de la portada, es la portada un arte. La portada es el preludio del disco que vamos a escuchar. Puede darse el caso de que sea una portada extraordinaria y sin embargo el contenido del álbum sea una patada al oído, al instinto creador. Puede darse también el caso contrario. Pero está claro, que una buena portada, original, que llame la atención, atrae al público. Le hace cosquillas a nuestro oído. Llama al timbre del tímpano para presentarle su oferta de canciones aún no escuchadas.

La publicidad hecha imagen, se convierte en un arte que atrae a toda clase de públicos y que nos invita a sumergirnos en un mundo visual distinto. Nos hace dormir con fantasmas llenos de imperfecciones, a los que no les importa el mundo del espectáculo, porque no son más que un simple recorte de una obra visual y musical, todo en uno.