domingo, 30 de mayo de 2010


Yo también tengo mi orgullo , ¿sabes?
Hay cosas que jamás entenderé. Cuando quieres algo, realmente luchas por ello, y te da igual conseguirlo una hora antes o después.
El tiempo es simplemente una excusa. La puntualidad no es más que un patrón que pocos siguen, porque somos así: nos gusta hacer esperar.
Y sin embargo, en vez de esperar con impaciencia, tomas una postura pueril, y cuelgas tus palabras, ahogadas, somnolientas. Palabras con rencor y odio, que esconden un "ahí te jodas" detrás de sus letras.
Pues nada, no seré yo quien mate tu orgullo, y no serás tú quien haga morir al mío.
Ahora, ahí te quedas tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Que tus susurros no se los lleve el viento. Ponlos por escrito :)